Artista: Natalia Lafourcade
Álbum: Mujer Divina 9.5/10
La rola: La fugitiva/Aventurera/Limosna
Adquierelo:Itunesç
En una escena musical llena de prejuicios, Natalia Lafourcade parece ser siempre el blanco mas fácil, sus canciones muchas veces rozan la simplicidad y están mas ligadas al pop (del bueno) que a otros géneros, pero sobre todo hasta hace poco era la única que se resistía a perder la "inocencia" lírica lo que se manifesto de manera absoluta en hasta hace poco su mejor placa Hu Hu Hu.
En una búsqueda de la reinvención la interprete decide buscar nuevos aires y como toda maestra de la experimentación regresa al pasado, se encuentra con Agustin Lara y se enfrenta a la Natalia mujer, a esa persona que solo necesitaba un poco de tiempo para salir, y así es como nace Mujer Divina.
El álbum es un devenir de las obsesiones de Natalia que van desde su ya clásicas acrobacias vocales (aqui un tanto contenidas), a los juegos simplistas musicales donde un pequeño "ruido" puede hacer la diferencia entre la energía y estridencia del producto final. Musicalmente es una especie de refinamiento de su propuesta donde poco a poco la parquedad se hace presente, se agradece y permite que la voz sea la protagonista.
El disco inicia con Adrian Dárgelos en el track que da nombre al disco y aunque en un principio el parece llevar las riendas del track, la pequeña aportación de Lafourcade le da la vuelta y a partir de ahí ella es la que lleva sus terrenos a cada uno de los invitados. Así es como Leon Larregui ("Imposible") parece emanar mas expresión de su boca, mientras que Gilberto Gil y Jorge Drexler sorprenden por la evolución que muestran vocalmente.
El primer sencillo "la fugitiva" continua siendo uno de los puntos mas altos, esperando que ese sonido lo mantenga en futuras producciones. Alex Ferreira se luce en "Aventurera", y Miguel Bose parece retroceder 20 años atrás y regalarnos una de sus mejores colaboraciones a la fecha.
Entre tanta colaboración uno podría pensar que no hay espacio para la propia cantante, pero en cuanto escuchas los primeros acordes de "Maria Bonita" te das cuenta de que para bien o para mal, Natalia esta mas allá de la escena musical mexicana, y se agradece. Un trabajo sublime, fino y sencillamente adictivo que abre las puertas para un futuro totalmente prometedor.
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