Mientras la cantante continua la grabación de su nuevo disco en Santa Monica, en la unión americana. Lana nos regala uno de esos covers desnudos que funcionan bien bajo esta formula. El elegido esta vez es Leonar Cohen, quien es autor de Chelsea Hotel N°2, un tema de esos que solo alguien como Cohen escribe, desnudo, revelador, intrigante y lleno de fuerza, aqui Lizzy Gran parece estar cantandolo desde la decadencia, esperando el fin.
Despues del sorprendente debut Almismotiempo (2009), la chilena tenia el mundo a sus pies,prueba de ello su participación en Viña del mar 2011, al lado de Calle 13 e Inti Illimani histórico, donde cautivo en una breve interpretación de Latinoamerica. Ahora con la ayuda de Chritian Heyne, Camila recoge las bellas melodías del pasado y las transforma en interesantes mantras que fluyen por el oído melomano, asi es como nace Panal.
El 2° disco de la cantante es una sorprendente consolidación de lo visto en su debut, y sin dejar de lado la parte de protesta, este trabajo se observa como un análisis de adentro hacia afuera. El primer sencillo Incendie, es una explosión de energía donde Camila se escucha diferente, desde como recita sus letras hasta lo desbordante de las guitarras que la acompañan.
Sin embargo a lo largo de sus 13 tracks Panal se convierte en una reflexión de lo que rodea a la cantante,desde el comentario social en De que?, hasta la powerballad Te quise, donde se acerca totalmente al pop, todo dentro de su territorio.
De los puntos altos destacan los temas Caer, lleno de una oscuridad simplemente hipnótica y el tema Yo enterre a mis muertos en tierra, donde hace un curioso comentario sobre un cementerio de la comunidad mapuche. Para la parte final, el disco se torna un tanto pesado, pero la voz de Moreno es suficiente para dar equilibrio
Este es un momento perfecto para la comunidad chilena, pero en el caso de Camila es mucho mas importante, viniendo de un estilo mas tradicional, ha hecho de su propuesta algo original, cercano a convertirse en la cantautora de su generación.
Durante mucho tiempo existió la duda acerca de un nuevo material de Timberlake por la simple y sencilla razón de que con Futuresex lovesounds, el cantante demostraba que deseaba acercarse al trono de Michael Jackson. Lo cierto es que después de experimentar lanzando a nuevos talentos a través de su sello discografico y de lograr tener las puertas abiertas de la industria, el cantante regresa con tal sofisticación que de repente Justin parece no ser mas Justin, si no una extraña variación futuristica.
Su tercer placa en 6 años, The 20/20 experience, es un trabajo que explota las mejores cualidades del cantante, que básicamente es su voz y su físico este último puede resultar algo extraño tratándose de música pero lo cierto es que este disco tiene un toque cinemático que se convierte en el arma de doble filo, pues si bien eso ayuda a dar una dimensión mas profunda a sus temas, en algunos esta característica los vuelve en puntos débiles de un trabajo, que para el tiempo de espera no debería defraudar, como un soundtrack de una película de acción que peligrosamente puede aburrir.
Producido por Jerome Harmon y presentando el regreso del icono caído del hip-hop Timbaland, Justin se acerca al pop a través de capas enteras de sonidos que navengan entre la electronica, el hip-hop y el r&b que se conjugan en una continua sinfonía de temas que rozan mas de los 6 minutos, cada uno de los tracks que mejoran con la escucha o que terminan por caerse.
Y es que durante los delicados beats de Suit&tie el cantante luce cómodo abrazando la madures al máximo pero dejando un espacio para la diversión que corre a cargo de Jay Z, que en una participación a secas logra darle energía al track. Lo mismo sucede en la enérgica Dont hold the wall, donde el ya clásico sampler de Timbaland y la voz de Timberlake hacen un peso pesado de la pista de baile.
En Strawberry bubblegum, el pop deja de ser un juego de niños para un track de 8 minutos que va de mas a menos, donde el sonido se desnuda poco a poco para terminar con la delicada voz de su interprete. Nuevamente convirtiéndose en un recurso que por momentos funciona. Y así pasamos del intro latino de Let the groove in, hasta los raros sampleos de una chica en Spaceship Coupe.
Los puntos débiles del disco se concentran en liricas que parecen de un jovenzuelo salido de una boy band, que de un hombre que con los años ha ganado experiencia. ademas de la producción de Timbaland que no importa con quien trabaje, necesita una renovación, algunos recursos ya suenan desfasados para una epoca donde artistas como Solange o Frank ocean ya le dieron mil vueltas.
El punto cumbre llega con Blue ocean floor, donde una cama electrónica crea lo mejor del cantante, un tema sencillo y romántico que sin duda te motiva a escuchar este disco. No es una placa directa y mucho menos puede competir con sus contemporáneos pero es un esfuerzo que a la larga lo colocara entre los iconos del pop, justo al lado del rey del pop, como el tanto desea.
Julieta Venegas siempre responde a un estado de ánimo en particular para escribir sus discos: el sorprendente nivel de optimismo del Sí (2003), el acercamiento a la diversión en Limón y Sal (2006), y el intimismo en Otra Cosa (2010). Lo cierto es que con cada álbum la compositora parece gozar esos pequeños cambios que generan una gama de sonidos que empatan con lo que ella desea contarnos....continua aquí
Durante mucho tiempo Alizee parecía estar desesperada por mostrar su valor ante el mundo pop, en pocas palabras que podía sobresalir sin Mylene Farmer. El problema es que en todo momento lucia poco concentrada en la música, como se comprueba en la diversa (e irregular) paleta musical hecha por su (ex) esposo Jeremy Chatelain en Psychedelices (2007), o el sorprendente esfuerzo del colectivo Chateu Marmot para Un enfant du ciel (2005). Aunque el primero era un disco irregular, el segundo parecía acercar a la cantante a una zona mucho mas familiar, sin embargo la poca o nula promoción de este provoco que fuera un fracaso.
La historia esta vez es diferente, la cantante se ha reunido con diversos productores y letristas, sin embargo el sonido es homogeneno y se aprecia un dejo de nostalgia por la Alizee de sus inicios, donde vocal y musicalmente, todo resultaba una fusión simple pero sumamente interesante. De eso va 5, la quinta placa de la cantante producida por Alexandre Azaria, quien lleva el mando en este viaje de 11 temas, donde participa tambien Thoumas Boulard y BB Brunes.
Aquí los sonidos recuerdan a lo mejor de la música francesa, que hacen un contraste adecuado a las acrobacias tecnológicas de su producción pasada. El primer sencillo Á cause de l'autonme, es un tema que crece con cada escucha, donde el sonido de cuerdas la acerca a bond y lo escuchado en el gran Mes Courants electriques. En 10 Ans la cantante se deja seducir por el rockabilly, mientras que el pop a medias tintas se aprecia en Je veux bien, o un homenaje a lo mejor del pop con Happy End, que podria ser candidata a sencillo.
Si buscas algún otro hit a gran escala, no lo encontraras, pero a cambio Alizee regala su desnuda voz en Mon Chevalier y Dans Mon sac, que se unen a la lista de sus mejores canciones a la fecha. Muchos se preguntan que sería de Alizee si no hubiera dejado a sus mentores, la respuesta es que inevitablemente hubiera existido una ruptura, lo importante es que por fin la interprete, la mujer y la niña de sus inicios se han encontrado y han decidido unir fuerzas para sacar lo mejor para una interprete infravalorada en su país y que por cuestiones de lenguaje sera difícil que vuelva a repetir el éxito. Sin embargo, de esta etapa independiente, y pidiendo disculpas por la mala calificación de su disco pasado, esta es sin duda su mejor placa a la fecha.
La mas bella exportación de Estonia parece estar sumida en un limbo artístico inexplicable, y es que aun parece algo de otro mundo, que una artista que esta completamente detrás de toda su imagen letras, voz y producción, sea relegada a las listas dance del Billboard.
Sin embargo como la musica no es en primera esencia un negocio, Kerli parece estar (por momentos) adelantada a sus contemporáneas principalmente por su habilidad para construir estribillos ambiguos que representan mensajes mas comunes de lo que parecen, una característica mas cercana a la narrativa literaria, trayendo historias fantásticas al mundo pop.
Ese es tal vez el mayor problema con este EP, donde visualmente la cantante se encuentra en su punto cumbre,pues a diferencia de Lady Gaga, la nativa de Estonia parece haber encontrado el balance perfecto para su aspecto visual. Pero musicalmente algo parece no terminar de empatar entre la musica y lo que desea expresar.
Bajo la producción de SeventyEight, la cantante se monta a la pista de baile,el problema es que por momento el sonido no esta a la altura de las circunstancias y ella termina siendo una cantante genérica. El tema inicial Can´t control the kids, encuentra el balance perfecto y recupera mucho de los guiños industriales del sencillo Army of love.Por otra parte el tema que promociona este EP, The Lucky ones, es un buen intento por ser mas radiable, pero a cambio parece perder mucho de su actitud. Las baladas Love or leave me y Chemical son buenos augurios de lo que la cantante podria ofrecer en un futuro,mientras que Here and now tiene potencial para encajar en el repertorio en vivo de la cantante.
A pesar de que parece estar bajo un bloqueo de ideas, Kerli merece una oportunidad, esperemos que su disco este a la altura de su debut, que sigue siendo uno de los discos mas interesantes del pop. Sin duda un EP de transición en espera de un nuevo disco.
Con la producción de Dev Hynes, la alineación original de las Sugababes se prepara para su gran regreso, cargado de sonidos urbanos mezclados con las mejores vocales, todo ello para recuperar el trono de la girlband mas exitosa a la fecha.
Este cover, original de Kendrick Lamar, es una delicia vocal que mantiene todos los puntos altos de la original, y lo lleva a un nuevo nivel. Sin duda están regresando con su mejor arma, la voz, habrá que esperar lo que suceda combinado con el talento de Hynes.
Con un sonido consistente y 100% el dúo ingles se prepara para su disco debut y mientras tanto muestran otro sencillo. Attracting Flies es un tema que crece con las escuchas, una gama potente de programaciones mientras una dulce voz, nos invita a mundo hedonista del pop, sin duda una propuesta interesante que le da otra cara al pop.
Directamente del DF, llega esta banda que se caracteriza por un sonido homogéneo que mezcla lo mejor de las melodías pop con guitarras y sintetizadores que no suenan a lo mismo gracias a la voz de Gustavo GS, que se escucha trabajada, con los matices necesarios para sobresalir, todo ello acompañado de discretas programaciones y sutiles acordes que anuncian que algo grande podria venir.
De la ola de artistas protagonistas de la era myspace, Kate es posiblemente una de las sobrevivientes mas afortunadas. Si bien su anterior disco (el mejor a la fecha) My best friend is you, resultó un fracaso comercial, la cantante ha decido que lo mejor es continuar, ahora bajo el rubro de la independecia.
Esta decisión le ha dado un giro de 180º a su carrera; adiós a los reclamos de juventud y hola a un concepto feminista que se esconde muy bien tras su portada, donde esta vez bajo el mismo concepto luce desafiante y aguerrida. Y de eso se trata su tercer disco Girl Talk, un compilado de canciones que nos presentan a una cantautora renovada, pero aun en búsqueda de una identidad propia.
Bajo la producción de Tom biller y Jeff Ellis, Kate dice adiós al pop organico por completo, aquí las guitarras punk y el sonido saturado lleva a su musica a un estado crudo, que sin duda sera la despedida para muchos que gustaban de la lirica directa de la cantante, que contrastaba con las melodías dulces.
Las letras y su temática es quizá lo mas rescatable, y es que en un afán de que sus sentimientos sean escuchados se ha puesto atención extrema en este departamento, dejando algunos detalles técnicos a medio camino. El tema introductorio, Part Heart, es un tema lento que muestran a una cantante llena de furia, mientra suena guitarra sube el ritmo. Y así comienza un ir y devenir de obsesiones que muestran los mejores momentos de la cantante (Sister) y temas nada memorables (3Am es sin duda uno de los peores temas de sus carrera), todo en favor de elevar un discurso que en entregas pasadas nadie quería mostrar.
En All talk la inocencia de Nash se vuelve algo vago y difuso para entregarnos un tema lleno de energia y oscuro con toda la esencia melódica que se pueda ofrecer. El problema aquí es la falta de un filtro para estos temas, siempre es riesgoso hacer un disco con muchos tracks, pero aquí es mas notorio que la producción de los temas no esta al mismo nivel de las otras,lo que genera cierta monotonía.
Es un disco dificil para la camada de fans wanabe de Nash, un acierto en su carrera, y una oportunidad para darle una escucha a un trabajo totalmente diferente,ponle play a este disco y después al resto de su discografia.
Despues de colaboraciones y temas en la red, llega el lanzamiento oficial del sencillo de Iggy Azalea, quien trae una escuela del hip-hop mas cercana a Missy Elliot que a sus contemporaneas. Su nuevo sencillo representa una aventura musical que se agradece, es fresca e incluso da pie para que una letra cliche como la de la canción se escuche apta para estos tiempos.
De Azelia posiblemente sepas mas por twitter que por su musica, lo curioso es que en un principio nadie encontraba esta cualidad ante un trabajo que le daba vuelta al hip-hop de Nicki Minaj. Las cosas ahora han cambiado y cada lanzamiento de banks se convierte en algo menos relevante, pues es opacado por sus constantes ataques contra quien se atraviese en ese momento.
Yung rapunsel es un tema que la poner mucho mas cerca del mundo electronico y que deja espacio suficiente para arpovechar la gama de beats que sueltan por minuto, mientras que Banks se lamenta de los su drama que simplemente no puede evitar. La prueba final viene con su disco debut, habra que esperar.
Si pudiera buscar una comparación para esta señora, lo mas cercano seria Sade, quien al igual que Dido, regresa a la escena musical cuando se le da la gana, siempre con uno o dos toques de innovación pero con el mismo estilo que la llevo al estrellato.
En el caso de Dido, desde el lanzamiento de No angel (1999), la gente aun espera que la cantante los invite nuevamente a bailar sutilmente. Hoy 5 años después del fracaso de Safe trip home, llega una placa que es una engañosa selección de temas que te obligan a repasar la discografia entera de la cantante y preguntarte ¿a donde se han marchado los hits?, y es que no necesariamente tiene que convertirse en una competidora mas de las listas de popularidad, pero sin duda no hay la dirección musical de sus anteriores producciones.
Producido por su hermano Rollo Armstrong y con las colaboraciones (anecdoticas) de Greg Kursting y Brian Eno, Dido regresa a sus raíces pero con menos energia y mucha mas pasividad que por momentos logra piezas memorables. Y eso es lo que posiblemente merezca la pena ser reseñado, el resto quedara en el baúl de los recuerdos como las aventuras menos arriesgadas en la carrera de la cantante a la fecha.
El tema que da nombre al disco, nos regresa a la Dido que estremecía con poco, y aunque no es un tema para bailar la cantante lo lleva a otra dimensión. La colaboración con Kendrick Lamar en Let us move on, nos recuerda que la cantante puede ser divertida, una producción que apuesta por la parquedad y que con unos cuantos samplers resuelve la melodía.
En Blackbird las revoluciones suben un poco, pero su letra cae en algunos cliches de cantautor que decepciona, mientras que en Sitting on the roof of the world, nos habla de como sobrevivir a la fama. Lo mas cercano a los intentos "no intencionados" de baile, es en "End of the night" que tiene algunos toques electronicos y un coro consistente, que la convierten en candidata urgente a segundo sencillo.
Para este punto el disco se ha convertido en una experiencia de medianos resultados, que nos obliga a preguntarnos lo que podría suceder si alguien más tomara las riendas de la producción. En los últimos 3 tracks podemos observar las facetas mejor trabajadas de la cantante, el corte expresivo en Happy New year, o la melancolía de Loveless heart. Pero si aun tienes fe en lo que Dido tiene que ofrecer, escucha la colaboración con Brian Eno, Day before went to war, un track siniestro,donde voz y musica se unen y se pierden las bocinas.
Después de sencillos mucho mas producidos y estridentes, Carla nos invita a cerrar la etapa de "Dejenme Llorar" con un tema que sencillamente es un delicia acústica. "Disfruto", es un tema sencillo que saca lo mejor de Carla, sin demasiados arreglos que sencillamente la acercan a una cantautora mas de sentimiento que de imagen.
El clip dirigido por Guillermo Llamas Altamirano, es un clip donde en un guiño a Sinead O´connor , vemos a Carla tratar de transmitir sus emociones a través de su mirada y algunos movimientos, que con ayuda de discretos elementos visuales hacen de este uno mas de sus, sencillos pero grandes logros visuales.